Reforma integral el Pamplona.
Nos encontramos con una vivienda muy peculiar: de una crujía estrecha y una gran longitud que le da fachada a dos calles opuestas. El programa se desarrolla en peine desde un pasillo que recorre la medianera norte disponiendo estancias que abren a un patio orientado a sur. Se trata de una vivienda de los años 20’s del siglo pasado en el Ensanche de Pamplona de muros de carga de ladrillo, ventanas y puertas de madera ccon cuarterones y tarima de pino tea enrastrelada.
Planta de estado Original y Reformado
La reforma llevada a cabo trata de recuperar y poner en valor los elementos más significativos de la vivienda original a la vez que se persigue mejorar la dotación de servicios y cocina y las condiciones de comfort interior. Así se decide reorganizar la zona de cuertos húmedos aumentando la cocina para que tenga más iluminación natural al contar ahora con 2 ventanas. El pequeño aseo y el baño existentes también se reorganizan para obtener dos baños amplios.
Se recuperan las puertas originales de la vivienda esmaltadas en un nuevo color que les de cierta alegría. Se recupera también la tarima original aclarada en su tono para ganar luminosidad en la vivienda. Se mantienen los techos originales de escayola moldurados.
Un objetivo primordial de la reforma era obtener un adecuado comportamiento energético por lo que se ha trabajado la envolvente térmica de la vivienda. Se han seguido criterios Passive House (Enerphit) en la medida de lo posible. Se ha incorporado 10 cms de aislamiento en fachadas y techos. Se han replicado las ventanas originales de madera y sus despieces pero conforme a las exigencias de hoy en día, incorporandoles vidrios triples de gran capacidad aislante. También se ha instalado una unidad de ventilación mecánica con recuperador de calor que renueva permanentemente el aire interior de la vivienda sin pérdidas de calor.
En cuanto a los acabados, como se ha comentado anteriormente predomina la tarima de pino tea original en todas las estancias. Se ha dejado a la vista el ladrillo del muro de carga en ciertas estancias (que no lindan con el exterior). La cocina se organiza mediante 2 frentes de trabajo vs almacenaje/lavado, liberando la zona junto a las ventanas en la que se sitúa el comedor de diario. Se optado, como en los baños, por un mismo formato para pavimentos y paredes cambiando el color de la pieza y dándole un punto con la lechada de epoxi en este caso en color amarillo. Techo acústico de viruta de madera. Mueble blanco brillo y encimera de piedra natural. El mobiliario fijo de baños y habitaciones se ha resuelto mediante tablero contrachapado marino de pino.